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El delito cibernético es una forma de crimen trasnacional que crece de manera vertiginosa. Las ganancias anuales de esta actividad van de los 300 mil millones a los tres billones de dólares, comenta Gary Davis, miembro de la Alianza Nacional de Seguridad Cibernética de Estados Unidos (NCSA, por sus siglas en inglés) y supervisor de programas de seguridad de Intel Security.

Según el Reporte Norton, uno de los estudios internacionales más grandes sobre delitos informáticos, en 2013, en México se perdieron 39 mil millones de pesos a causa del cibercrimen, con un costo promedio para cada víctima de cuatro mil 381, el doble que para el año anterior.

Según la Asociación Mexicana de Internet (Amipci), 65 millones de mexicanos son usuarios de internet, lo cual representa casi 60% de la población del país. Actualmente, 36% de los mexicanos usuarios de internet utiliza el servicio para realizar compras en línea, y 26% lo hace para realizar operaciones de banca en línea, pero el experto en delincuencia cibernética explica que el robo de información bancaria o financiera no es el mayor atractivo para los criminales.

La obtención de información como correo electrónico, teléfono, domicilio y otros datos personales, es el objetivo principal del cibercrimen, datos que muchas veces son otorgados o compartidos sin consideración por los usuarios, incluso en las redes sociales. Hay que considerar que, según la Amipci, 79% de los mexicanos utiliza internet para acceder a estas redes sociales.

Los cibercriminales ahora están interesados en acceder a los datos personales, con los que pueden robar identidades y cometer fraudes. Los datos personales valen hoy de 10 a 20 veces más que las tarjetas de crédito, por lo que muchas organizaciones criminales se especializan en obtenerlos.

Gary Davis explica que estos grupos delictivos cuentan con 560 millones de tipos de software malicioso, de formas para obtener datos personales; asimismo, cada hora se detectan 5.8 millones de archivos infectados y 4.3 millones de intentos para atraer a las personas a hacer algo que las dañe cibernéticamente.

 Los aspectos de seguridad ya no pueden evadirse en ninguna industria, en el campo de la publicidad es fundamental asegurar estos aspectos, tanto desarrolladores de páginas web como estrategas de marketing digital deben cuidar en su actividad diaria.